Vive en la tundra ártica, es pequeño, blanco y muy astuto, sí, hablamos del zorro blanco (Vulpes lagopus) y su característico pelaje blanco que adquiere en invierno mientras que en verano es café.
Son carroñeros y gustan de comer pequeños roedores, aves e insectos, su increíble adaptación los hace verdaderamente admirables, ya que en su hábitat natural, la temperatura llega a descender hasta -70° C algo que logran gracias a su pelaje protector.
Ya que no hibernan, los zorros blancos se mantienen activos todo el año, son monógamos y sus camadas suelen tener varios cachorros, esto durante los meses de abril a mayo cuando existe mayor diversidad de alimento.
Si bien no son una especie en peligro de extinción, suelen ser cazados para tomar su piel, un recordatorio que hacemos es NO comprar está clase de accesorios y evitar fomentar su comercio.